lunes, 8 de febrero de 2010

Orden, por favor.

Nunca es agradable ponerte a arreglar algún rincón de tu cuarto. Tu cuarto, sí, aquel en el que los pares de zapatos se reparten por el suelo; aquel en el que encuentras libros y revistas que recordabas olvidados; aquel en el que los discos están cada uno en carátulos diferentes; aquel en el que los bolígrafos, papeles, y libros se esparcen por el escritorio tras un día de estudio.

Pero siempre toca ordenar algo, y siempre hay algo que ordenar. Hará un par de días le tocó el turno a una estantería con unos cuantos joyeros, cajitas, cajones y demás.

Encontré cosas incluso olvidadas: el colgante de Barbate con el cual tantisimo lloré al romperse el defín que llevaba, un collar de las varias excursiones del colegio e incluso la cadena de la comunión. Cosas que ni recordaba.

Pero siempre es gratificante relacionar cada una de esas pequeñas cosas que ibas encontrando con su historia que tenía detrás. Vale, quizás insignificante; pero demasiado importante cuando tenias unos 10 años menos.

Y más gratificante es aún encontrar las tarjetas regalo de El Corte Inglés de los premios del instituto.

2 comentarios:

Raquel dijo...

¿La has encontrado? Guay, pues ve pensando que me vas a comprar XD.

Cosa Cosota dijo...

Pues sí pequeñaja, me vuelvo a dejar caer por aquí xD.

No sé cuándo cambiaste el blog pero me mola mucho cómo está.

Dios... el fin de semana pasado tmb me puse a colocar mi habitación (sí, mucho que estudiar y no se me ocurre otra nada mejor que coger todas mis cosas y recolocarlas y limpiarlas y tirar otras cuantas). Tuve muchos quebraderos de cabeza para dejar cada una en su lugar, en ese lugar especial que deben tener todas y cada una de ellas (si no... ¡¡a la basuuraaa!!) para crear la armonía que necesito al mirar a mi alrededor. Y encontré también varias olvidadas, pero las que más me gustaron fueron fotos vuestras, antiguas y no tanto, recordando cada momento haciéndome echaros de menos e incluso llegar a las lágrimas.

Y, ¿sabes cuál ha sido el lugar especial de todas ellas?

Mis paredes. Sí, dediqué casi toda la tarde y parte de la noche a pegar vuestras hermosas caras en las paredes de mi habitación. Porque realmente no estaría completa sin vosotras, mi habitación no diría nada de mí sin vuestra presencia.



Ahí tienes mi comentario empalagoso de la semana ;)

Será que os echo demasiado de menos.


Por cierto, me ha encantado eso de encontrar cosas que "recordabas olvidadas", muy contradictorio y poético xD


¡Un muá!


PD: ¿Recuerdas cuando nos picábamos en el blog del msn para ver quién dejaba los comentarios más largos, o "testamentos"? xD

PD2: ¿Y los 108374012910820129 postdatas que dejábamos a continuación, muchas veces más largos que el comentario en sí?

PD3: Fin de la transmisión.